sábado, julio 25, 2009

De vidas a una carta y corazones plastificados



-->Si el otro día hablaba de que la naturaleza es matemática hoy voy a hablar de algo que la describe como SABIA:El corazon es el único músculo en que no hay receptores del dolor y por lo tanto no puede doler. Imaginaos que algo que se rompe tanto además doliera.La tasa de suicidios sería terrible...
Sin embargo se produce un efecto mariposa que me hace discutir todo lo anteriormente comentado: cuando un corazon se rompe lo que duele es el alma. De ahí que los más antiguos tendieran a ubicar en sus dibujos de anatomía el alma en el pecho, justo donde reside el corazón,cómo si fuese un componente más.Y es un componente más, pero de nuestra existencia. Está claro que no voy a inventar a estas alturas ninguna teoría sobre la dualidad cuerpo y alma que tanto juego ha dado siempre,aunque es algo harto atractivo.
EL CORAZÖN DUELE ,el corazón se rompe, y es el alma la culpable y la que se resiente:Un alma que deja desprotegido sus sentimientos, que los presta a otros generosamente, corre el riesgo de terminar con el corazón roto y por tanto sufriendo.Y es aquí cuando aparece nuestro amigo Raimundo Amador.
Los guitarristas maltratan sus uñas contra la guitarra.Cierta vez escuché a Raimundo contar que cuando tenía muy mal sus uñas les hacía a estas una “armadura” que consistía en capas de papel (de fumar)y pegamento instantáneo (Loctite).El Loctite cuando se seca llega a ser más duro que una dura uña.
A nuestro corazón metafísico le ocurre lo mismo: conforme más veces se nos rompe y más veces lo reparamos, cuanto más “loctite psicológico” usamos en el pegado de los trozos más resistente se hace.
¿y cual es ese “loctite psicologico”?.Yo sostengo que es el Amor. Raro es el caso de aquel que preguntado sobre las razones que alegaría para no autoquitarse la vida no mencione a ninguna persona querida. El amor a un ser querido, presente o no, el anhelo de amar a esa persona que nunca pudimos amar como quisimos puede mantener con vida al “corazón” más hecho papilla que imaginemos.Incluso el Amor culminado tiene la facultad decurarlo todo.

Pd:Ha nacido un nuevo sobrino para mi, le he dado unos minutos de cariño ...y me ha devuelto Loctite!

3 comentarios:

Javier Fornell dijo...

Lo malo es que el amor, al igual que puede ser un pegamento, puede ser un disolvente. No hay nada peor para romper un corazon y llevar a la autodestrcuccion que el desamor.

Nils dijo...

Exacto querido Cathan, pero consideremos que el desamor es el no-amor.El desamor tal y como solemos emplearlo es algo más enfocado al amor sentimental entre dos personas más allá del amor "innato" familiar.
que bueno que contigo siempre vive nuestra dialéctica.
Gracias.

Javier Fornell dijo...

Cierto, normalmente cuando hablamos de amor se habla del "sentimental" pero no del fraternal, ni siquiera del que se puede sentir por los amigos.

Pero cuando hablo de desamor hablo tambien de ese otro tipo (el fraternal). Y no hay nada mas duro que ese tipo de soledad. Porque amor y desamor no son mas que formas de terminar con la soledad, no lo olvides.